Suman 46 mil 477 casos confirmados de COVID-19 en Chihuahua

Se mantienen decesos en 4 mil 300 en la entidad; la vacuna contra Coronavirus llegará en el transcurso de enero y servirá como una herramienta más para combatir a la pandemia

Con 63 casos nuevos registrados en las últimas 24 horas, el estado de Chihuahua llegó a 46 mil 477 contagios confirmados de COVID-19, informó la Secretaría de Salud.

Arturo Valenzuela, subdirector médico de la dependencia en la Zona Norte, dio a conocer además que las defunciones se mantuvieron en 4 mil 300, aunque esto no significa que no haya habido decesos, toda vez que es posible que la estadística no lo haya registrado de forma oportuna.

Hasta las 07:00 horas de este día, el informe indica que hay además 29 mil 118 personas recuperadas de la enfermedad (+93), hay otros 24 mil 715 casos descartados (+23) y 2 mil 264 sospechosos (+20).

Los municipios de Juárez, Chihuahua, Parral, Delicias y Cuauhtémoc, se mantienen como las poblaciones con el mayor número de casos.

Juárez acumula 26 mil 276, Chihuahua 10 mil 822, Delicias con 1,729, Parral concentra 1,585 y Ciudad Cuauhtémoc tiene 1,462. Los registros en estas localidades representan el 90 por ciento del total de personas afectadas que hay en todo el estado.

Entre los municipios que también registran el mayor número de contagios son Ojinaga con 849, Nuevo Casas Grandes tiene 685, Camargo 306, Bocoyna 295, Guachochi 264, Meoqui 236 y Jiménez con 219.

Además, del total de personas infectadas, 23 mil 949, que equivale al 52 por ciento, son varones y 22 mil 528 (48%) son mujeres.

Valenzuela añadió que será durante el transcurso del presente mes de enero cuando lleguen las vacunas contra el COVID-19 al estado de Chihuahua, una herramienta que, explicó, ayudará para el fortalecimiento del sistema inmune de las personas y que se espera haga una notable diferencia.

No obstante, precisó que esto no quiere decir que la población pueda relajar las medidas preventivas, bajar la guardia, hacer fiestas o deje de portar el cubrebocas.

“Es una herramienta más y lo peor que podemos hacer es confiar en que toda la solución está en una vacuna”, añadió.